“Eso si que estoy seguro que su actitud quedará como sublime ejemplo para las Fuerzas Armadas y todos aquellos que compartieron su vida y esfuerzos”.
Fue mucho el esfuerzo y la esperanza durante aquellos tristes días en que estaba secuestrado, y nosotros su familia, en San Alfonso, unidos, tratando de hacer lo más posible para recuperarlo, pero todo esfuerzo fue en vano. Gerardo fue asecinado con un tiro en la cabeza y su cuerpo fue tirado al río Maipo. En la investigación de su muerte hemos pasado por muchas personas corruptas, pero dentro del túnel siempre hay una luz en el final. Debemos agradecer el espíritu de justicia y verdad de la Honorable Jueza Brisa Pérez, que en su notable afán por descubrir la verdad nos ha ayudado a todos. La familia con fe en la Justicia Divina hemos continuado la vida, preocupados por el futuro de los que dejó. Con la seguridad que esta Justicia se cumplirá, junto con los valores por los cuales Gerardo sacrificó su vida.
El caso fue abierto nuevamente en Septiembre del 2005 por el Magistrado Claudio Pavez, que con una labor extraordinaria declaro la muerte de Gerardo Huber Olivares un homicidio y condeno a 4 asesinos.
|